Cierta analogía

Suaves caricias sobre tus mejillas rosadas
Repito una vez más que eres la chica indicada
Inmensos abrazos a cada momento sobre el sofá
Arrojo lejos el tiempo para no entender que está
cerca la hora de la inoportuna despedida
Dispongo demi cariño como lo sientas, a tu medidad
Comienzo a perderme en tu rostro mientras comentas
Cosas de la simple vida: las compras, las cuentas
Me aferro a tus manos como al mismísimo cielo
De vez en cuando bajo lentamente hasta llegar al suelo
Para acercarte el dolor de mis heridas
Tue entenderás mis caídas
Tendrás las palabras justas para levantarme
y en tus brazos podré al fin cobijarme
Sin frases en vano, decoro cada instante a tu lado
Ríes y callas, permanezco allí sentado
Puede que haya dejado la mitad de mi cuerpo en llamas
supongo algo tan habitual cuando amas
A esa bella dama de algunos años más
Confía en esta doctrina veráz
Solo emplearé mi comprensión, confianza y fidelidad
Sentirás en mi interior un corazón buscando prosperidad
Junto a tu dulzura y simpatía
Recibiré bendiciendo la cálida luz del día
Cuando besando tus labios caiga el anochecer
Mirando alrededor veré las flores de amor crecer
Coloreando el suelo debajo de nuestros desnudos pies
Entonces tomaré una rosa y la observaré cuando no estés
podré admirar cierta analogía
Verás por qué cuidadosamente te protegía
Tan frágil como los capítulos del futuro
Tu bienestar, única razón por la que perduro

Nicolás Biaggini